Por: Cristian Basaure
"PERMITIDO CAER, JAMÁS DEJAR DE LUCHAR"
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Dicen que las derrotas hacen crecer a un equipo y que hay que estar preparado para aquello.
Luego de 54 fechas en el liderato del fútbol chileno la Universidad Católica cayó ante el Audax Italiano de Pablo Sánchez que le cerró todos los espacios en el Teniente y con gol de Fabián Torres vía juego aéreo quedó momentáneamente en la cima del torneo con 7 puntos.
Así fue el parado táctico del comienzo.
Sistemas espejo que terminaron por neutralizarse, poco por banda y en la mitad de la cancha un juego trabado que desde mi perspectiva se dio porque ambos persiguen la presión tras pérdida y eso ayudó a chocar, más que a fluir.
La jugada más clara de la primera etapa fue un robo de balón en salida de Aued sobre Fernández y una transición rápida que Lezcano no pudo resolver ante la salida del portero Muñoz.
Audax tuvo esbozos de llegadas, que también eran generadas por algún error técnico provocado por la presión audina en zona de gestación cruzada. En definitiva un primer tiempo que tuvo más ruido que música.
Ingresó Leiva por Nuñez , sin embargo el registro del partido seguía igual.
En el 65´avisó Torres en pelota parada con un cabezazo que dio en el horizontal y dos minutos más tarde, también con una jugada al segundo palo, el mismo central anticipó a Huerta y puso el 1-0 a favor de Audax. Claramente con el resultado a favor los de La Florida retrocedieron en la cancha y se replegaron en bloque bajo entendiendo que la UC arriesgaría más de la cuenta y así poder definir vía contraataque el encuentro.
Poyet movió el banco y modificó el sistema a línea de 3 para darle amplitud con Leiva y Fuenzalida por las bandas.
¿Que pasó?
Pablo Sánchez le emparejó la cancha con la misma disposición táctica, con el uruguayo Fernández libre y Torres con Labrín sobre Zampedri y el novel Aravena que ya estaba en cancha, subió a Cereceda y Fernández para tapar a los externos cruzados y a partir de ahí sostener un resultado que era oro.
Duelos de la segunda etapa.
En definitiva los cruzados iban por ímpetu, una cuestión inherente al futbolista en la derrota, pero careciendo de claridad para destrabar a una estructura defensiva de Audax que aguantó hasta el final un marcador que bajó al líder tras 54 fechas en la cima.
Ganó Audax y es noticia porque bajó al Tricampeón que como cualquiera de nosotros, puede permitirse caer, jamás dejar de luchar.